¿Qué fue del Cheetah, el club neoyorquino donde ‘nació la salsa’?
El 26 de agosto de 1971, las Estrellas de Fania ofrecieron un concierto irrepetible en el club Cheetah de Nueva York. Medio siglo después, un equipo de Salserísimo Perú llegó hasta ese lugar.

Hace cincuenta años, un grupo de músicos y cantantes bajo el nombre de Fania All Stars remeció el club nocturno Cheetah de Nueva York. En ese momento, nadie presagió que esa reunión se convertiría en el hito más importante de la música latina.
Johnny Pacheco y Jerry Massucci, dueños del sello Fania Records, en alianza con el promotor Ralph Mercado, sin proponérselo, congregaron ese día a más de 4 mil personas. Pero ese día también ocurrió un fenómeno: nació la salsa.
¿Quiénes estuvieron esa noche? En la delantera de cantantes figuraron Cheo Feliciano, Santos Colón, Pete Conde Rodríguez, Adalberto Santiago y Bobby Cruz. Además, dos jovencitos que se abrían paso en la música: Ismael Miranda y Héctor Lavoe. Ellos, con el respaldo de unos músicos líderes de sus propias orquestas, fueron dirigidos por el dominicano Johnny Pacheco.
Para suerte de los melómanos, esa jornada no solo fue grabada en vinilo sino que quedó registrada en el documental Nuestra Cosa Latina, a cargo del director León Gast. Evidencia fílmica que graficó la cotidianidad de los latinos, sus lamentos, sus alegrías y su lucha por salir adelante y cumplir el ansiado sueño americano.
Medio siglo después nos preguntamos ¿qué pasó con el Cheetah? ¿Qué hay ahí ahora? Un equipo de Salserísimo Perú viajó a Nueva York para el rodaje del documental ‘Cheetah, el día que nació la salsa’. Y durante la realización, Daniel Álvarez, periodista y director de la película, nos contó que, en contraste con las luces multicolores de aquella noche, hoy la fachada del recinto es un edificio gris y multifamiliar.

Se ubica exactamente entre la octava y novena avenida con la calle 52. El dato fue confirmado a Salserísimo Perú por José Mangual Jr., Johnny ‘Dandy’ Rodríguez y varios músicos que con nostalgia se refieren al lugar. Según refieren, el recinto fue demolido hace, aproximadamente, treinta años.
Actualmente, muy cerca del Cheetah funciona una oficina postal. Y es la señal que muchos hijos de latinos tienen como referencia para llegar al lugar donde bailaron sus abuelos. Hoy, rostros multinacionales transitan por el lugar sin imaginar que hace medio siglo, en ese espacio, ocurrió algo que marcó a los latinos para siempre.
Algo que para la comunidad latina es un eco que no ha dejado escucharse. Es el Quítate tú pa ponerme yo. O el increíble Anacaona con el piano de Larry Harlow que hace unos días partió. Como ya lo hicieron varios de sus compañeros. En esta fecha especial, te abrazamos cincuenta veces, Salserísimo.